Este año el premio
Artesu Toda una vida se le ha
concedido a la firma de artesanos Lurbe Zeramika o las dos almas que están
detrás de este nombre Itziar Bengoa y Gloria Etayo. Ambas recibieron el
homenaje de todos sus compañeros en el transcurso de la Gala Artetsu Sariak.
Emocionadas se fusionaron con el aplauso de quienes saben reconocer el trabajo
bien hecho. Más de dos décadas de trayectoria en la que según sus propias
palabras, “lo nuestro ha sido una historia de amor a tres bandas: Itziar,
Gloria y el barro”
Las
protagonistas de este pasaje son dos mujeres emprendedores y sabias que
encontraron en el barro la fuerza de sus vidas. De la arcilla surgieron sueños
y realidades. Su conexión con la arcilla hizo fluir la amistar, el trabajo y la
creatividad.
Cada
una inició su camino en solitario. Itziar en su casa natal, en el bilbaíno barrio de Begoña, cuya huerta
se convirtió durante su niñez en el lugar ideal para moldear el barro. “Siempre
he estado ligada a la tierra y siempre tuve claro que el barro y yo éramos casi
una sola cosa”.
Gloria
nacida en Basauri, tuvo que esperar a la juventud para descubrir el barro. Fue
casi por casualidad, “pero nada más tocar su densidad, su maleabilidad, su
textura, supe que ese era el germen de mi creatividad. Esa era yo”.
Tras
diversas vicisitudes Itziar y
Gloria se encuentran en unos cursos en Basauri. Su conexión fue total, tanto es
así que deciden crear Tierra y Color, un espacio para la creación y exposición.
Poco después deciden dar el salto y constituirse como taller artesano. Fundan
Lurbe Zeramika en 2002.
En
su local en la calle Fika de Bilbao han trabajado con amor sus piezas únicas, algo que han sabido
valorar sus clientes, muchos de ellos convertidos en amigos, “porque si hay
algo cierto en nuestra trayectoria es que la mayoría de nuestros clientes se
han convertido en nuestros amigos”, afirman ambas.
Con
su energía desbordante han afrontado todas las vicisitudes a las que les ha
hecho enfrentarse la vida, “con sinceridad y admiración la una por la otra”.
Quizá por eso sus piezas, además de ser únicas, transmiten tanta verdad.
En
2014 sin haber cumplido los 65 deciden retirarse. Ninguna quiere seguir
adelante sin la otra y es por ello que bajan la persiana de Lurbe
Zeramika. Fue una decisión muy
meditada y nada fácil de tomar. “Nos costó mucho dar ese paso, pero cuando una
de nosotras decidió dejar el taller, la otra asumió que nada tendría sentido si
una de las dos faltaba”.
Atrás
quedan los recuerdos. “Cuánto lloré cuando vendí mi primera pieza en Madrid. He
sentido cada uno de mis trabajos como un hijo. La verdad es que si pudiera los
recuperaría todos”, dice Gloria. “Cuánto he disfrutado con Gloria, el nivel de
compenetración ha sido total y absoluto, con sólo mirarnos sabíamos el camino a
tomar, eso es algo más que trabajo es amistad y no tiene precio”, asevera
Itziar.
Como dice el refrán tanto montaba una como la otra y ambas se sintieron arropadas por los
artesanos de Arbaso, en la Gala Artetsu Sariak.
No hay comentarios:
Publicar un comentario